No existe una biblia sagrada que te explique cómo organizar tu boda para que todo salga perfecto y sin errores por lo que puedes encontrarte con un montón de pequeños fallitos e imprevistos con los que no contabas en un principio. Pero hoy te contamos cuáles son los errores más típicos que (probablemente) cometerás en la organización de tu boda, sobretodo si eres principiante, para que al menos estos sí los puedas evitar.
No establecer un presupuesto
Las bodas son caras. Así de simple, puedes ahorrar a la hora de planificarlas de muchas maneras distintas pero al final, hagas lo que hagas, te salen por un pico. Por ese motivo es muy importante que establezcas un presupuesto y tengas MUY claro lo que estás dispuesto a gastar, después podrás hacer pequeñas modificaciones pero si tienes claro este punto, te ahorrarás un montón de disgustos.
Obsesionarse con la fecha y el lugar
Desde que eras pequeñito has tenido claro que querías casarte en tal sitio y tal día, y no vas a aceptar otra cosa. Está bien tener sueños y las cosas claras pero desde aquí te recomendamos que mantengas una mente abierta, pueden surgir varios motivos por los que esto acabe resultando imposible así que intenta tomarte esos imprevistos con el mejor humor posible e intenta siempre buscar opciones alternativas. Si te vas a casar con quien quieres seguro que al final, pase lo que pase, la boda acaba resultando imperfectamente perfecta.
Empezar a planear la boda sin tener la lista de invitados
No te pedimos que tengas hasta el último invitado confirmado para empezar a organizar tu boda pero sí que, al menos, tengas una idea aproximada porque puede cambiar drásticamente el lugar de la celebración y el presupuesto.
Invitar a cualquiera
Tu prima te ha dicho que su tía segunda tiene una amiga cuyo hijo pequeño es muy majo, seguro que lo primero que se te pasa por la cabeza es invitarle a tu boda, ¿o no? Eso no funciona así, ¿verdad? Pues lo mismo ocurre con tus conocidos, igual quieres una boda masiva a la que pueda acudir hasta tu vecino del sexto con el que nunca has cruzado más de dos palabras, y si te lo puedes permitir, es una idea tan buena como cualquier otra. Pero si vas un poco más ajustada o simplemente no te interesa ese tipo de boda no empieces a añadir a la lista de invitados a cualquiera que se te pase por la cabeza. Recuerda que es tu día y no se trata de quedar bien, invita únicamente a aquellos que de verdad quieres en tu boda, seguro que el resto lo entenderán y si no lo hacen, no es culpa tuya. Si invitas a los que más quieres todos os lo pasaréis mejor.
Gastar demasiado dinero en el vestido de novia
Muchas novias olvidan que el dinero que se invierte en el vestido no incluye solo a este sino que hay que añadirle los zapatos, las joyas, el velo, diversos complementos y los posibles arreglos que sean necesarios. Con la tontería puedes quedarte con una mano delante y otra detrás, así que ten esto siempre presente y encontrarás tu vestido perfecto.
No contratar vídeo y música profesionales
Tienes un amigo DJ o a tu primo le gusta grabar vídeos. Todos tenemos bastante inculcado que se necesita un fotógrafo profesional para que te haga las fotos de tu boda pero es que lo mismo ocurre con los vídeos y la música, son igual de importantes y un mal uso de ellos puede desmejorar tu boda. Igual tu amigo es un excelente DJ, no lo dudamos, pero asegúrate de contratarle por ese motivo y no por ser tu amigo.