La mañana de tu boda
Ha llegado el día y estás como un flan, no te preocupes porque todo va a salir genial pero para eso primero tienes que hacer unas cuantas cosillas. Así que si estás lista para el gran día vamos a ello:
Desayuna
Vas a caber igual en el vestido y cuando haya pasado toda la mañana y no hayas podido probar bocado nos lo agradecerás. Por mucho que se te haya cerrado el estómago intenta comer algo, que no queremos que te nos desmayes en medio de la fiesta.
Llévate una maleta para la noche de bodas
No es muy divertido despertarte a la mañana siguiente sin ni siquiera tener unas bragas limpias que ponerte, así que ya sabes, ropa interior, ropa para el día siguiente, pijama (si vais a usar), el neceser y bueno, la maleta completa si salís disparados a vuestra maravillosa luna de miel.
Te vas a estresar, asúmelo
No todo a va ser muy zen y pajarillos cantando, una boda es estresante pero intenta asumir todo ese estrés y pasártelo bien, tómate con buen humor cualquier fallito con el que te encuentres, que por mucho que se compliquen las cosas (aunque esperemos que no lleguemos a ese punto) al final del día todo acabará bien y podrás reírte de todos aquellos momentos.
Controla bien el tiempo
Que una mañana se pasa volando y si te tienes que vestir, peinar y maquillar, antes de que te des cuenta ya tienes que estar plantada en la iglesia o el lugar de la ceremonia.
No te olvides del kit de emergencia para novias
Tiritas, imperdibles, hilo y aguja incluso, tijeras, medicamentos, maquillaje para esos pequeños retoques, cualquier cosa que se te ocurra. Asegúrate de hacer una lista el día anterior para que no se te pase nada por alto y ¡a por todas!